A veces el control de la situación es mejor que la satisfacción de la misma, lo que puedes tener a disposición sin importar si existen sentimientos de por medio es uno de los mejores recursos que uno puede contar para evitar salir lastimado de una relación llámese como se llame, o al menos eso pensaba Henry, si bien no hace falta entregarse por completo, tan sólo basta con identificar las necesidades de su próxima victima para sentirse satisfecho de nuevo, los placeres de la vida se pueden obtener sin un compromiso si sabes jugar tus cartas y de vez en cuando blofear incluso con una mano mala, de todas formas si se llega a perder, el tallador no tardará mucho en repartir un nuevo juego mientras haya fichas de tu lado.
Joanna era una chica de buena familia, un poco aburrida pues desde joven sus padres tenían un control estricto con sus horarios y amistades, las decisiones importantes las terminaban eligiendo alguno de ellos y en el peor de los casos ambos, por lo que creció sin mucho criterio y por supuesto sus elecciones de pareja dejaban mucho que desear desde el momento que se sentía identificada con alguien que pudiera tomar las riendas de su vida por completo, sin duda no pudo encontrar un mejor ejemplar dado tan entrenado como Hank o al menos eso era lo que el pensaba, lo curioso de la condición humana es que al final uno nunca sabe cuanto tiempo una persona sumisa lo puede tolerar o por otro lado un egoísta obsesivo puede hacerse de una carga más pesada de la que quiere controlar.
Llevaban saliendo cerca de ocho meses, para entonces Hank, tenía armado por completo sus actos de desaparición, reconciliación, separación y reencuentro, hacía falta se aburriera un poco de la monotonía que le ofrecía Joanna para inventarse un viaje de trabajo, una reunión hasta tarde lo que pospondría sus visitas un par de días porque por supuesto al otro día estaría desvelado y no sería justo para ella estar juntos cuando el estuviera cansado o sin ánimo, si se requería de algo de más tiempo, una discusión lo solucionaba, un pequeño defecto o malentendido podría ser causa de una separación inminente pero gracias al cariño y amor que se tenían sólo terminaba siendo "un tiempo" para pensar o dejar que el coraje se bajara, al final de cuentas, un ramo de flores en su oficina, un collar, una cena romántica, una serenata o un par de cartas podría resolver cualquier inconveniente. - ¿Un patán?, posiblemente, no se le podría juzgar más allá sin saber sus sentimientos, lo único malo es que eso sólo los conocía el y en ocasiones no estaba tan seguro, ¿una injusticia para ella?, lo mismo, estaba en su derecho de terminar esa relación en cualquier momento que lo considerara adecuado, pero el confort que te da estar con alguien, creer que el amor es la aceptación completa del otro y miedo a quedarse solo nubla cualquier visión de mejora a corto plazo, encadena las relaciones y genera sentimientos de esperanza por mejorar o hacer que el otro cambie pues el cariño todo lo puede, bonito discurso para justificar miserias.
Fue un miércoles por la tarde, un día como cualquier otro, no un fin de semana donde se puede disponer del día completo a placer, fue en cuestión de minutos mientras platicaban camino a casa después de un tiempo juntos, hacía casi un mes que no había pelea alguna, ni jornadas largas en el trabajo o pretextos para evitar verse, para ella la relación iba mejor que nunca, para el tal vez sólo no tenía algo mejor que hacer y esta vez estaba muy atento a lo que ella le contaba, sin embargo la mujeres no siempre tienen el tino preciso para dejar salir a flote sus sentimientos, habrá algunas que lo toman con calma y otras que prefieren decir las cosas como las sienten cuando se sienten seguras que la persona con la que están les corresponde, -decir un "yo a ti" o un "yo también" no implica el mismo sentimiento del que dijo algo esperando una respuesta, es mas el compromiso de tener que responder o meterte en un problema- Joanna no lo pensó mucho, se recargo en su hombro, suspiró y comenzó, las palabras exactas son difíciles de transcribir, pero los temas principales fueron en el siguiente orden: el valor actual de su relación, su magnífico entendimiento, lo increíble de encontrar a la persona ideal y lo sorprendente que es darse cuenta que es con quien se está, la visión de un futuro juntos, una familia y alguna otra idea tomada de una película, en cualquier otro momento Hank hubiera interrumpido la conversación para hablar de lo que fuera, el tema era lo de menos, lo importante es no dejar que se extendiera tanto pero no lo hizo, puso atención a cada palabra, tuvo sentimientos encontrados y la mayoría no fueron del todo buenos, habían por fin flanqueado sus defensas y no podía hacer nada, el daño estaba hecho y antes que fuera permanente tenía que tomar acciones inmediatas, sólo que tenía la mente en blanco, llegaron a casa de Joanna, el se despidió sin decir mucho, ella estaba encantada, por fin había tomado las riendas en algo y al parecer le había salido bien, no había nada que pudiera quitarle la sonrisa de la boca por días, a Hank le hubiera gustado poder sonreír.
Esa noche Hank no pudo dormir, no sabía que hacer ni mucho menos que pensar, se sentía responsable por algo que no había buscado, posiblemente lo había provocado pero era por su propio bien, por su seguridad por evitar ser el quien dijera cosas de las que se arrepintiera después, lo que no previó fue que en al mismo tiempo se hacía de una carga que día a día se hacía más pesada, el saber que eres tan importante para alguien y que te tiene en sus planes de una manera tan profunda era algo nuevo, nunca había dejado enterarse de tanto, ¿y qué si sentían?, "si yo no lo sé entonces no esta ocurriendo" pensaba, se justificaba en la ignorancia de los sentimientos de los demás para evitar la culpa incluso si la intuía, pero era tarde, ya no pensaba en su actual problema si no en lo que dejó pasar, cuantas veces pudo escuchar esas palabras de alguien más, posiblemente de alguien que le importara más o que valiera más la pena. Empezaba a clarear el día, había podido conciliar el sueño por poco tiempo, despertó aún con el sentimiento de vacío en el estómago, la situación en la que estaba era insostenible, o cedía y se entregaba o terminaba y salía triunfante como tantas otra veces pero sin el mismo sabor de victoria en la boca, habló a la oficina para reportarse enfermo, se tomó el día para tomar una buena decisión, sólo que esta llegó hasta el domingo.
Joanna recibió una nota el lunes muy temprano en su oficina, no sabía nada de Hank desde el miércoles, pero no estaba preocupada, era casi normal que se ausentará unos días sin muchas noticias y después de lo que "habían" platicado ella estaba muy segura de lo que tenían, la nota versaba:
"Joanna, - No se bien como decirte esto, pero no estoy bien, no he dormido en días, no dejo de pensar en tus palabras y aunque valoro cada una de ellas por lo que sientes por mi, no puedo seguir adelante con esto, yo no pedí esto a pesar de que me lo busqué, sólo que ahora no se que hacer con eso y sólo puedo pensar que es una carga, lo lamento, no te mereces esto, no espero verte de nuevo ni que me perdones, suerte en tu historia y ojalá encuentres pronto quien te corresponda. - Hank."
Termino de leer la nota, se levanto de su lugar y fue a la oficina de su jefe, se sentó frente a su escritorio no sin antes cerrar la puerta para evitar que alguien escuchara, su jefe la miraba atento y un poco sorprendido, ella sólo dijo:
- bueno... tenías razón, se asusto y me dejo, no fue ni para decírmelo en mi cara, pobre bastardo, que se pudra!, en fin, teníamos un trato, ¿es este viernes o el siguiente cuando nos vamos de fin de semana?...
--------
Caras vemos, historias escuchamos, pero realmente sabemos con quien estamos?
En calidad de mientras y quien sabe si lo averiguamos, mejor intentar darse por completo en una relación sin esperar algún resultado, la idea es no dejar pasar oportunidades que pueden ser excelentes por salir bien librados, mejor que no quede en uno y si en los demás.
----
Ya tenia ganas de escribir otra mini-historia :)
Cha,
Oct-10-2010
12:27 AM.
